martes, 29 de mayo de 2012

Puertas que se abren

Las ideas se atropellan por salir igual que un montón de adolescentes en la entrada de un concierto.
Mi mente intenta controlar el bombardeo pero no tiene mucho éxito.

Demasiadas emociones en muy poco tiempo.

Demasiados cambios en dos días.

Mucha información.

Muchas puertas que se abren. A donde ir? Que camino tomar? Cual es el correcto?

Mi corazón lo sabe, mi inconsciente también. Sólo tengo que acallar el ruido para oír el sonido. Sólo tengo que respirar profundamente, cerrar los ojos y volverlos a abrir para ver.

Suena fácil, da miedo, es emocionante, me saca el sueño.

Una vez más veo como la vida puede dar un giro inesperado y absoluto en un momento.

Aquí estoy con mi copa de vino tinto, un rioja cosecha 2008, buscando una respuesta, una luz, una señal. Hoy creo que sólo vendrá el sueño, y lo agradezco.

Mañana, como dijera Scarlet O'hara en Lo que el viento se llevó: mañana será otro día. Y con el la luz de la mañana que siempre hace ver más claro.

Respiro muy profundo y muy lento.

Busco el sueño, el mejor compañero de esta noche, a falta de mejor oferta.

No me quejo, hoy prefiero dormir profundamente y levantarme con la sensación de: lo tengo, lo veo claro, ese es el camino.

Dulces sueños, tampoco está mal no?

El Rioja se desliza por mi garganta, el sueño asoma, mis párpados se cierran más a menudo.

Estoy segura: mañana será otro día y tendrá mucho que contar.

lunes, 14 de mayo de 2012

Un rato de sol

A mediodía salimos a sentarnos al sol. Si, sentarnos al sol. Al aire. Al viento.

No queríamos café, no queríamos más compañía que la nuestra. Solo nos interesaba disfrutar de unos minutos en contacto con la parte de la naturaleza que se nos ofrece a pocos metros de la oficina.

Charla, intercambio de novedades y unas cuantas risas.

Soplaba un viento lo bastante fuerte como para que nos despeináramos mucho y daba la sensación de estar subidas a una moto. El efecto del viento se me hacía agradable, era como formar parte del paisaje. Mientras charlábamos y nos apartábamos el pelo de la cara fuimos poniendo en orden nuestras “tazas”. Nos llenamos de aire los pulmones, de oxígeno el cerebro, y de buenas vibraciones el alma.

Nos reímos con ganas, de algunas cosas divertidas y de otras no tanto, pero indudablemente el sentido del humor es un antídoto para casi todo.

Miramos la hora, nos acomodamos el pelo, volvimos caminando bajo el sol, nos bajamos del ascensor cada una en su planta. Hasta mañana.

Compruebo una vez más que el compartir y comunicarse desde el alma es lo que hace la diferencia.

Un rato de sol, un momento de reflexión, unos minutos para detenerse y ver, no solo mirar.

Miro con ilusión, veo con más claridad, ahora no hay sol, pero tengo tibia la piel, estoy despeinada y mañana espero estarlo más.

lunes, 7 de mayo de 2012

Que nos sucede...

Me dolió ver la realidad. Tal vez por eso me costó verla. Se me hizo difícil armar el rompecabezas, a pesar de que tenía todas las piezas delante de mi. .No me gustaba la imagen que se insinuaba, menos me gustó cuando se impuso y no quedó más remedio que aceptarla.
Habían sido para mi la imagen del amor. La imagen de algo sólido construido al abrigo del tiempo, con sabor a experiencias compartidas, con olor a primavera que se espera cada año a fin del invierno, y con un sonido familiar, conocido, esperado.

Esto me deja un sabor amargo, de realidad triste y una pregunta flotando en el aire: si se empieza demasiado joven también acaba demasiado pronto?

No es algo que a mi deba preocuparme. Una cosa menos!! casi no me lo creo. Pero mi capacidad empática me impide abstraerme de asunto sin cuestionamientos.

Por que dos personas que llevan juntas toda la vida, pueden llegar a alejarse tanto o mejor dicho: como?

Tal vez por que cuando empezaron eran unas personas y con el tiempo se volvieron otras?

Suena como el bolero: “que nos sucede vida que últimamente ya nos miramos indiferente...”

Estoy triste, me pregunto si es el destino de todos es terminar distanciándose, y haciéndose daño en el proceso. No solo se trata de mirarse con indiferencia. Se trata de dinamitar todo aquello que existió, todo lo compartido, todo lo vivido, lo amado, lo deseado.

Al menos deberíamos tener el valor de parar a tiempo.

Amor, dolor, pasión, indiferencia, ternura, violencia, dulzura, agresión. Múltiples caras de una moneda.

Por que nos cuesta tanto aprender a no herirnos mientras avanzamos por la vida?

Estoy triste.

Alguien puede encender la luz del faro guía? Hoy estoy como en una noche sin luna...